10 pájaros chulísimos que puedes hacer con calcetines esta Semana Santa

1. Gonzalo, el gorrión

Gonzalo es un pariente cercano del gorrión común y estará encantado de quedarse cuidando tus huevos de chocolate mientras vas a comer a casa de los abuelos el domingo. O si quieres presumir un poco, llévate los huevos y también a Gonzalo, a este pájaro le encanta viajar en coche.

2. Petra, el pavo real

Petra es una de las aves más sociables que existen. Con su espléndida cola y su cresta de limpiapipas, siempre está lista para ir de fiesta. Hay quien dice haberla visto de juerga en el bebedero de pájaros, ¡menuda pájara está hecha Petra!

3. Fran, el frailecillo.

La nariz de Fran no está roja por casualidad: está hecho del dedo gordo de un calcetín y claramente lo identifica como el payaso del clan. ¿Que cuál es su chiste favorito? Me alegra que lo preguntes:

P: ¿Qué pesa más: un pájaro de 3 kilos o un bebé de 3 kilos?
R: El pájaro. Porque pesa 3 kilos y pico…

4. Gabriela, la gaviota

Es bien sabido que la curiosidad de Gabriela la ha metido en situaciones bastante embarazosas. Por suerte, su rostro inocente (¡mira qué carita!) también la ha sacado de esas situaciones embarazosas. Pregúntale sobre aquella vez que se le atascó el pico en la caja de galletas…

5. Pedro, el petirrojo

Aunque la Semana Santa no es la época del año favorita de los petirrojos, (prefieren a Navidad), Pedro no puede resistirse a pasar tiempo con sus amigos emplumados. Y, francamente, si hay chocolate a la vista, él no andará lejos.

6. Paquito, el periquito

Paquito es originario de Australia y tiene muy buen carácter, así que no le importa estar atado a este palo con un par de limpiapipas.

7. Frida, el flamenco

Lo primero que le llama la atención de Frida a la mayoría de la gente es que tiene el cuello muy largo. ¡Y tanto! (Se sostiene con la ayuda de un palito de helado, por cierto). Pero no mucha gente sabe que también es una campeona de la rayuela.

8. Lorenzo, el loro

Como todo loro que se precie, Lorenzo puede hablar hasta quedarse afónico. Pero ten cuidado con lo que dices a su alrededor, porque le entusiasma el cotilleo. Lo descubrimos cuando reveló donde habíamos escondido los huevos de Pascua para la búsqueda del tesoro.

9. Hmm….

Para ser sinceros, la verdad es que no estamos seguros de qué pájaro es este, pero probablemente ya te has dado cuenta: cualquier calcetín de cualquier color puede convertirse fácilmente en un pajarito. ¡Siempre será recibido con las alas abiertas!

10. Pilar, el pinzón

Pilar es la benjamina del grupo, así que a menudo la encontrarás bajo el ala de los demás, porque le encantan los mimos. ¿Y quién podría resistirse a pellizcar esos mofletes verdes?

Paso 1

Llena un calcetín con algodón o piedrecitas, o un poco de ambas cosas. Luego mete el primer calcetín en otro calcetín y usa la cuerda para atar las diferentes secciones. Aquí tenemos una cabeza, un cuerpo y una cola.

Paso 2

Ahora viene la parte delicada. Haz que Paloma tenga una barriguita de colores cortando una abertura con cuidado en el calcetín exterior. Así, el calcetín interior se verá desde fuera.

Paso 3

Una vez hecha la barriga, toca centrarse en la cola. Haz algunas plumas cortando el extremo del calcetín en tiras. Puedes hacer una cola larga, corta o muy poblada… ¡lo que más te guste para Paloma!

Paso 4

Para hacer el pico, corta dos agujeros diminutos, introduce un trocito de limpiapipas y dale forma de pico. Haz lo mismo para las patitas, pero usa un trozo de limpiapipas más largo y déjalo recto.

Paso 5

Solo faltan los ojos para que este pajarito cobre vida. Pega dos pequeños puntos de fieltro como hemos hecho aquí, o bien puedes usar botones o cuentas.

¡Listo, ya tienes a tu propia paloma Paloma! Recuerda, puedes adaptar este tutorial para improvisar algunas de las otras aves. O, mejor aún, invéntate tu propio pajarito.